Que todos se arrepientan
- Juan Alberto Reyes Raymundo
- 12 jul 2020
- 2 Min. de lectura

En realidad, no es que el Señor sea lento para cumplir su promesa, como algunos piensan. Al contrario, es paciente por amor a ustedes. No quiere que nadie sea destruido; quiere que todos se arrepientan.
2ª Pedro 3:9.
Nuestro amado Dios anhela que todos conozcamos a Cristo a través de un verdadero y genuino arrepentimiento para vivir una vida de intimidad con Él.
Él quiere que cada uno de nosotros nos reconciliemos con Él, no busca ser un Dios apartado de su creación. Tampoco busca ser un Dios autoritario. Él quiere tener comunión contigo y conmigo. Él desea mostrarnos cuánto nos ama. Y nos está dando el tiempo para que nos arrepintamos y le entreguemos nuestra vida.
Quiere que la mayor cantidad de seres humanos nos salvemos, porque realmente Él anhela que todos nos salvemos y no que muramos eternamente.
A cada cristiano se nos ha encomendado la misión de ir y predicar el evangelio a toda criatura, hasta lo último de la tierra. Es importante que cada uno retomemos la misión que se nos ha asignado y que nuestra oración sea que pidamos con pasión por las almas perdidas, que nos de la fuerza y la valentía para levantarnos y predicar el mensaje de salvación. Que aprendamos a ver a los que se pierden, con los mismos ojos de amor con que Dios los ve. Que nuestro corazón se compunja como el del Señor por los perdidos.
Levantémonos y seamos agentes de salvación en este mundo que está perdiéndose sin Dios. Traigamos luz en medio de esta sociedad que vive en la más densa oscuridad.
Dios nos ama y no quiere que nadie perezca. ¡Quiere que todos se arrepientan!
El único camino es Jesucristo.
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